Intruso en la foto
A veces, algún espontáneo o espontánea se cuela sin decir nada en tus fotos para fastidiarlas, pero cuando lo que se cuela en el selfie que te estás haciendo con tu amiga es un balón que está impactando directamente en tu cara, la que se fastidia además de la foto, eres tú. La pobre chica sonriente seguro que dejó de sonreír para levantarse y gritar al culpable de ese pelotazo.
Con mucha hambre
Los perros son seres sorprendentes. Te dan un cariño y un amor sin igual y de manera incondicional pero también te hacen pasar ratos muy divertidos. Como este cachorro, que está tan hambriento que ya hasta se muerde él mismo pensando que esa cola es algo comestible. Seguramente después de esa foto el dueño tuvo que consolarle porque se haría mucho daño. Estos perritos son de lo que no hay.